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El Servicio Geológico Colombiano y la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres conformaron un equipo interdisciplinario que visitó la zona afectada por el movimiento en masa que ocurrió en el municipio de Rosas, departamento del Cauca. Este equipo conformado por geólogos e ingenieros civiles con diferentes especializaciones y maestrías, tuvieron el propósito de caracterizar el deslizamiento que se presentó en las veredas La Soledad, Santa Clara, Párraga Viejo y Chontaduro. Afortunadamente no hubo víctimas fatales en la emergencia debido a que esta comunidad identificó a tiempo los cambios en la morfología del terreno y se organizó con funcionarios de la Alcaldía de Rosas para emitir alertas tempranas e iniciar un masivo proceso de evacuación, antes de que se movilizara la gran masa que se conoce hoy día por varios medios de comunicación.
Uno de los retos de este equipo de profesionales fue adelantar actividades de comunicación del riesgo en los diferentes escenarios de participación con las autoridades y las comunidades. En el marco del Puesto de Mando Unificado (PMU), los profesionales socializaron sus análisis y evaluaciones de la situación. Sin embargo, existía un gran temor y zozobra tanto en las autoridades municipales como en la comunidad de las veredas vecinas del cerro Broncazo, pues corrían mensajes angustiantes a través de redes sociales donde se aseguraba que el cerro se iba a caer. El día 12 de enero el equipo de geólogos inició un recorrido a pie para verificar las partes del movimiento, la corona (zona de inicio) y los flancos (zonas laterales del deslizamiento), en compañía de Franklin Flores, un líder de la zona. Se quería hacer una evaluación rápida del escenario de riesgo y poder comunicar de manera efectiva la situación real de las veredas. Durante la caminata por encima de la corona del deslizamiento, a través de laderas con pendientes muy abruptas, se encontraron con mujeres y menores de edad, que desesperadas y angustiadas intentaban huir de la zona de emergencia.
Conversación con habitantes de Santa Clara y Alto de Yerbabuena
En el recorrido por el flanco derecho del movimiento, llegando al sector de Santa Clara, las personas trataban de sacar lo que pudieran de sus casas. Esta comunidad manifestó su agradecimiento a los geólogos por ser los primeros funcionarios que asistían a la zona y acompañaron la visita, aportando información relevante para la identificación de las grietas y los escarpes que se habían formado en sus fincas.
La comunidad de Santa Clara acompaña el recorrido de evaluación del movimiento en masa
Acompañamiento de la comunidad en la identificación de grietas de tracción y escarpes en Párraga Viejo y Santa Clara
Habitantes de Párraga Viejo intentando sacar elementos de sus viviendas para improvisar albergues en la zona de Párraga Nuevo
Cerca de las 5:30 pm, se logró llegar al centro poblado de Párraga Nuevo, donde por lo menos 40 personas se agruparon alrededor de la iglesia y el parque, para escuchar la evaluación de la situación, de acuerdo a lo observado por los geólogos. La comunidad de Párraga y los afectados del sector de Santa Clara y Párraga Viejo y otras veredas vecinas, que se albergan en este centro poblado, escucharon atentamente la descripción del movimiento en masa, los peligros potenciales en los próximos días y se dio un parte de tranquilidad, pues en el sector de Párraga Nuevo no existía ningún riesgo latente.
Elaboración de un esquema del deslizamiento y localización de elementos expuestos.
Ejercicio de comunicación del riesgo a los habitantes de Párraga Nuevo
Los habitantes de esta comunidad atendieron las recomendaciones tanto del SGC como de la UNGRD en cuanto a mantener la calma, a organizarse comunitariamente para hacer el monitoreo de algunos puntos de manera segura y a concertar mensajes concretos y seguros en caso de alertas, y se comprometieron a no difundir cadenas de whatsapp con información no verificada, que pudiera alterar su estado emocional. Además, las personas hicieron preguntas sobre el deslizamiento, sugirieron recorridos de verificación adicionales y nuevamente agradecieron con aplausos y manifestaron en varias ocasiones que “Esta noche, sí podemos dormir tranquilos, llevamos cuatro noches sin dormir”. La comunidad de Párraga afectada en su salud mental, recibió cálidamente a la comisión, a pesar de la escasez de víveres en la zona y de las condiciones sociales, los albergó en sus casas y acompañó los recorridos en zonas aledañas al flujo de tierra que se está presentando en la vía Panamericana. Los profesionales de la UNGRD y el SGC comisionados para esta emergencia recalcan que la comunicación de la ciencia es vital y que el entendimiento técnico de la situación que ha ido cambiando día tras día, es fundamental y tiene sentido solo si contribuye a salvar vidas, a restablecer tranquilidad en los afectados y a solucionar cuestiones críticas de movilidad y abastecimiento para las veredas incomunicadas. Además, valora y aprecia el acompañamiento de la comunidad en el trabajo de campo realizado en la zona de la emergencia.